Pyrenaica 219 (2005)
del Tachamontes
Pyrenaica 219
Especial Cordillera Cantábrica
2005
Editorial
Granja, Josu Mirena;Alejos, Luis
Se nos había olvidado que existe la Cordillera Cantábrica. Ha transcurrido casi una década desde que visitamos por última vez (1996) sus valles y cumbres, pese a que muchos montañeros y montañeras, residentes sobre todo en territorio vizcaíno, iniciamos la progresión hacia la alta montaña en el Alto Campoo y el Alto Carrión. Esos macizos, y tantos otros, siguen ahí, cada vez más cerca, ofreciéndonos múltiples opciones para practicar nuestro deporte favorito. Lo comprobaremos al leer el nuevo extra de Pyrenaica, un reto que nos planteamos cada año con sumo agrado.
Antes de encargar las colaboraciones diseñamos un esquema de trabajo que hemos sido capaces de cumplir. Nos propusimos recoger una muestra de actividades a desarrollar en ese grandioso escenario por senderistas, ascensionistas y escaladores, siempre buscando algo nuevo y especializado, desde los grandes bosques del Saja hasta la altiva fortaleza de Mampodre; desde la evocadora Peña Sagra hasta los altos Carrión y Esla, pasando por los lagos y las cabañas de Somiedo. Había otros temas esenciales para tratar, como una semblanza de Lueje, pionero en la descripción de sus cumbres; resultaba inevitable recordar la destrucción de Riaño y nos apetecía citar aspectos tan singulares como la mitología local.
Nuestra meta sigue siendo consolidar la trayectoria iniciada con los números especiales, sobre todo en el dedicado a Picos de Europa: conseguir nuevas firmas y contar con autores ya consagrados. Todo ello, jugando a tope con las nuevas tecnologías de la comunicación para coordinar las colaboraciones a través del correo electrónico, recibiendo y corrigiendo los textos, rebuscando datos en internet, y mucho más.
Tenemos que destacar especialmente la cantidad y calidad de autores que han respondido nuestra llamada, todos ellos son expertos en las zonas que tratan, y muchos cuentan con publicaciones en su haber. No han dudado en poner lo mejor de sus conocimientos al servicio de Pyrenaica, y lo han hecho desinteresadamente, siguiendo la línea que ha forjado durante tantos años la solera de la revista. El resultado final es el que tienes entre manos: un plato que hemos intentado sea de calidad, de pura montaña cantábrica, sin colorantes ni aditivos artificiales, preparado al fuego lento de la auténtica pasión y dedicación por la Cordillera Cantábrica.
Así mismo, en este número hemos puesto a prueba la eficiencia, compenetración e incluso imaginación del nuevo equipo de Pyrenaica. Sin ese esfuerzo común no habríamos llegado hasta aquí. Ahora os toca valorar los resultados de todo ello.